sábado, 27 de febrero de 2010

Agüita, agüita, que la tierra está sequita

Hola a todos.
"Agüita, agüita, que la tierra está sequita". Cantan en La Rama de Agaete y en las traídas del agua en otros sitios de la isla. Y este invierno el agüita ha caído que es un gusto.


Tenía la intención de componer una oda al agua, al saber de las grandes presas llenas en mi isla canaria, cuando las noticias me trajeron la magnitud del desastre en Madeira producido por las lluvias torrenciales. Pensé entonces hacer una elegía. Me debatía entre el canto alegre y la tristeza. Y aun ahora en que escribo estas líneas no sé que rumbo tomarán mis palabras. Siento la muerte de tantas personas y el destrozo enorme en la isla hermana.

No conozco Madeira, tan cercana, y sin embargo tan lejana en un tiempo. Ahora las comunicaciones son más fluidas y los canarios tenemos la posibilidad, y diría yo la obligación, de acercarnos para conocerla. Quienes han ido hablan de una isla hermosa. Parecida, dicen, a La Palma. Exuberante y con mucha agua. Con muchas montañas y casas preciosas. Y flores, muchas flores, me comentan...

El agua en Gran Canaria ha sido bien recibida esta vez. Ha llenado presas que rebosan haciendo correr barrancos. Y ha sido benigna en destrozos. Aunque nunca llueve a gusto de todos, el sentimiento en la isla es de satisfacción. Bien es cierto que han quedado casas malparadas, carreteras cortadas y se han producido situaciones de riesgo. Pero el agua almacenada da para varios años de riego y eso a la postre es lo que interesa.

Te deseo un buen día.

viernes, 26 de febrero de 2010

Un ratito de buen humor



Hola a todos.
Dentro de un amplio programa de actividades organizado por el Distrito Cultura del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, sin grandes pretensiones y con el único objetivo de que el respetable pasase un ratito de buen humor, el grupo Profetas de mueble bar puso ayer sobre las tablas el espectáculo "¡Ay Canarias mía!" una parodia costumbrista en dos actos, y un pequeño entreacto al que han llamado "la muda", en el que las protagonistas son unas desbocadas lengüinas que no dejan títeres con cabeza.


"Las tablas" en esta ocasión era el escenario del teatrillo (o salón de actos, que queda más fino) del IES La Isleta. Su representación en este lugar se hizo coincidir con las celebraciones del flamante Día de la Isleta que se celebra hoy. ¿Y a qué obedece este día? Pues al empeño de los isleteros que asumen esta fecha para expresar la "isleteridad" como seña de identidad capaz de unir y dinamizar al barrio. No en vano, la colocación de la primera piedra hace ahora 127 años del Puerto de la Luz y de Las Palmas propició que la ciudad se abriera sobre sí misma forzando las murallas que la oprimían, y empezara un largo ciclo de esplendor que aun continúa, eso sí, contando con La Isleta como motor principal de empuje.

Te deseo un buen día.

martes, 23 de febrero de 2010

La Raspa

Hola a todos.
Las tranquilas aguas de la Playa de Las Canteras recibieron un año más los restos de la Sardina. En esta ocasión la incineración fue cosa vista y no vista. Casi, casi, como si hubieran encendido un fósforo en la orilla y éste fuera apagado por la brisa nocturna. Tan poco duró. Y es que este año de la Sardina quedaba solamente las raspas. En boca del dúo humorístico Piedra Pómez ello se debe a la crisis ya que no hay dinero para poner una sardina bien entera como otras veces, y por ello tan sólo se paseó y se quemó la desolada espina central y la cabeza. Así las cosas no estuvieron nada mal. Había un gentío de mucho cuidado en la playa esperando expectante al acontecimiento anunciado como final y principio de los carnavales. Porque acabaron los del 2010 y ya se anuncian los del 2011. Y es que la gente tiene ganas de juergas. ¿Cómo si no mantener el espíritu abierto para combatir estos tiempos de cinturones apretados en los que las raspas de las sardinas terminarán siendo nuestro único alimento? ¿O no era eso lo que nos querían decir en el velatorio y en la quema?

Gracias que al final unos buenos fuegos artificiales, con su colorido juego de luces sobre el mar, pusieron el oportuno rayo de esperanza para tantas viudas de don Carnal que durante muchas horas acompañaron al cortejo fúnebre con risas y sollozos y con grandes esperríos, muestras de su tristeza.



Te deseo un buen día.

viernes, 19 de febrero de 2010

Ventarrón

Hola a todos.
¡Fuerte ventolera se metió la otra noche! El ruido del viento era incesante con rachas muy fuertes que parecía iba a llevarse por delante todo lo que encontraba a su paso. Las palmeras en el parque, vistas desde las ventanas de mi casa, parecían peonzas que danzaran impulsadas por un gigante. Se balanceaban y sus copas bajaban y subían como queriendo besar el suelo en el que están ancladas. Alguna, más débil, sucumbió al embate del feroz enemigo y quedó cortada en dos partes llorando su mala fortuna.

No sé a ustedes, pero a mí el viento me inquieta poniéndome casi histérico. El 'pomo' se me desconcha y mis nervios parecen cuerdas de violín que solo necesitan un pequeño roce para sonar. Y es que el viento es un mal enemigo capaz de hacer jugarretas con su fuerza, y en estos casos me veo volando con mi casa como voló Dorothy en la película El Mago de Oz. ¿La recuerdan? Dorothy vive en Kansas con su perrito Toto; viendo que le quieren quitar al animalito intenta ir a vivir con él "en algún lugar sobre el arcoiris". Debido a un tornado repentino todos en la granja, menos la niña y el perro, se atrincheran en el sótano y entonces la casa sale volando envuelta por el tornado con ellos en su interior, cayendo tras muchas vueltas sobre el arco iris... y en Oz, fantástica tierra donde habitan brujas buenas y malas, un espantapájaros que habla, un león cobarde y un hombre de hojalata...

Les aseguro que a tanto como a un tornado no llegó el viento la noche pasada, pero ¡caballeros y caballeras! yo me veía ya compartiendo aventuras con Dorothy y Toto en el maravilloso mundo de Oz.




Te deseo un buen día.

miércoles, 17 de febrero de 2010

Beethoven

Hola a todos.
Hace algún tiempo decidí nombrar a Ludwig van Beethoven mi ídolo protector. Por dos razones: porque es uno de los más grandes genios de la música y porque quedó sordo. No es que yo vaya camino de ser lo primero pues mis habilidades como músico son tan tristes y ramplonas que no dan para mucho. Más bien voy camino de lo segundo. Como he comentado mi audición va tan mal que a lo mejor -a lo peor, habría que decir- terminaré tan sordo como el pobre Beethoven. Espero que no, ¡Dios sea loado! para seguir disfrutando de las obras de este compositor genial. Como gocé viendo la película Copying Beethoven que es una mezcla de ficción y realidad sobre los últimos años de la vida del gran músico, cuando éste, sordo total, compone la Novena Sinfonía. En la película, Anna Holtz, joven estudiante de composición musical, (que nunca existió), es enviada por el conservatorio para ayudar en la transcripción de las partituras. Así, con este tema, asistimos a diálogos imposibles y a la recreación del estreno dirigido por el propio Beethoven de esta su sinfonía genial, y escuchar, entre otras, su sonata Claro de Luna que llega al fondo del corazón.



Te deseo un buen día.

lunes, 15 de febrero de 2010

San Valentín

Hola a todos.
¿Qué mejor que un poema para felicitar a la amada o al amado en el día de los enamorados? Un poema de amor resulta barato, es un regalo hermoso y transmite elevados sentimientos. Los poetas tejen con rimas de oro y palabras de plata preciosas telas con las que cada uno de nosotros podemos hacernos hermosos trajes acordes con nuestros sueños. Es por ello que la Concejalía de Cultura del Cabildo de Gran Canaria ha unido a la festividad de san Valentín, día de los enamorados, una iniciativa a favor de la lectura: el repartir por las calles de la ciudad, a jóvenes y mayores, a mujeres y hombres, unas cuartillas de colores variados, y variados poemas, bajo el eslogan "Díselo con una poesía". Se enmarca dentro del Plan de Fomento de la Lectura -Leer es vital- que la Corporación Insular lleva años promocionando.

Estuve yo ayudando y por ello estuve repartiendo cuartillas. La gente se lo tomaba bien, con una sonrisa, y muchos se paraban a leer la poesía que en suerte les había tocado. Para ti, me quedé con una. Es ésta, de S. Armas Calcines:


SI PUDIÉRAMOS...
... irnos los dos muy solitos,

allá muy lejos, muy lejos...
Donde no hubiese mentiras,
ni hipocresías, ni convenios...

Y amarnos sobre la tierra,
bajo las luces del cielo...
Como se aman las flores...
Como el gamo, como el ciervo...


Te deseo un buen día.

sábado, 13 de febrero de 2010

Estrellas

Hola a todos.
El Parador de la Cruz de Tejeda está a una altitud de 1049 metros, o sea cerca de las estrellas. Por ello, la otra noche, aprovechando la ausencia de nubes y de la luna, que al estar en cuarto menguante dejaba el cielo con un color negro azabache, salí del parador bien abrigado para ver las estrellas. Me alejé un poco de los focos de luz eléctrica adentrándome en la negrura de una de las carreteras que llegan al cruce, y miré al cielo, y quedé boquiabierto. Ante mis ojos el espectáculo grandioso de la bóveda celeste con cientos -con miles- de puntitos blancos brillando en la obscuridad. Creí ver, y a lo mejor fue una presunción mía, el carro de la Osa Mayor. ¿O era la Osa Menor con la estrella Polar que nos señala el norte? Mis conocimientos de las estrellas dejarían en evidencia a mis profesores de astronomía si los hubiera tenido...

Estuve largo rato mirando a los alto hasta casi dolerme el cogote. Una estera o hamaca para poderme tumbar sin sentir el frío del suelo me hubiese venido de maravilla. Al no tenerla estuve de pie en actitud reverente todo el rato que pude, mientras pensaba como los urbanícolas, ansiosos de luz eléctrica en nuestras casas y calles, en nuestros edificios emblemáticos y en las plazas y avenidas de nuestras ciudades, hemos despreciado la luz de las estrellas.

Te deseo un buen día.

miércoles, 10 de febrero de 2010

Grato paseo


El Roque Nublo
Hola a todos.
Justo enfrente del Parador de la Cruz de Tejeda se inicia uno de los tantos caminos reales que recorren Gran Canaria. Lleva éste a los Llanos de la Pez, lugar frecuentado por amigos de acampadas y asaderos y situado algo más arriba de donde está el cruce de carreteras en donde se encuentra el Parador. Este camino real del que hablo es empinado y desde abajo, en su primer tramo, se ve una larga senda que sube casi recta durante un buen trecho y que luego se pierde entre los árboles y matorrales. No es apto para cardíacos, o no debiera serlo, pues yo me animé a empezarlo pese a mi infarto, pensando, eso sí, tomarme la vida con mucha calma en la subida. El día despejado y sin mucho calor ayudaba en la caminata y yendo despacito, moviendo una pierna después de pedirle permiso a la otra, fuimos ascendiendo -mi mujer y yo- disfrutando de la vista que se nos ofrecía, siempre igual pero siempre cambiante, con el Nublo y el Bentayga a nuestra derecha y el padre Teide con su pico nevado cubriéndonos las espaldas. Allá que nos pareció nos tumbamos bajo la sombra propicia de unos pinos y retamas y dimos cuenta de los bocadillos, de queso curado de la Cumbre, y de una media botella de vino que llevábamos para la ocasión.



Roque Bentayga


Andando que te andarás bordeamos, siempre en ascenso, impresionantes barrancos. El Roque Nublo estaba cada vez más cerca y podíamos apreciar el Fraile y La Rana que son su eterna compañía, recortados los tres sobre el azul luminoso del cielo. Después de un tiempo largo, muy largo, llegamos a un punto en el que el camino se hacía llano y un poco más adelante nos encontramos pasando junto al Corral de los Juncos y entonces supimos con el olor penetrantes del pinar que ya estábamos cerca de nuestro destino.



El pinar cerca del Corral de los Juncos




El regreso, después de un café que nos supo a gloria, lo hicimos por la carretera general sombreada por los árboles en la caída de la tarde. Fue un grato paseo viendo abajo a lo lejos las casas que cada vez más, ¡qué pena!, van asaltando sin pausa, en su empuje irresistible, a todo el paisaje isleño, y comprobando con placer como las plantas agradecidas, regadas por la lluvia caída en los últimos días, mostraban su belleza.

De vuelta al cruce de la Cruz de Tejeda, sentados en la terraza del restaurante El Refugio, hicimos recuento de la larga caminata y pudimos decir: ¡valió la pena!

Te deseo un buen día

martes, 9 de febrero de 2010

Puesta de sol


Hola a todos.
El sol tomaba su camino diario rumbo al descanso de la noche y dejaba tras de sí los colores que adornaban el cielo. Los amarillos y rojos, los naranjas y violetas se entremezclaban resaltando los grises de unas pocas nubes y el color pétreo de los roques. De pronto unas nubes bajas, como jirones de algodón, vinieron cabalgando a galope desde el este y se esparcieron bajando por las laderas dividiendo el paisaje en cuadros preciosos. Arriba el Roque Nublo y el Betayga que no querían dejarse atrapar. A la derecha, el cielo cambiante por segundos con todos los colores imaginables. Abajo y a la izquierda el blanco de las nubes cargadas con infinitas gotas minúsculas de agua, que no llegan a caer, y a su lado el verde de los campos que va desapareciendo.


Todo ello veíamos desde la terraza de nuestra habitación en el Parador Nacional de la Cruz de Tejeda. La habitación, amplia y bien soleada da justo a poniente y permite ver la magnificencia de la Naturaleza. En la mañana, totalmente soleada, podíamos ver las montañas que llamó Unanumo "tempestad petrificada" con los soberbios Roques luciendo en todo su esplendor. Fuera el aire es limpio y frío. Llega una excursión de estudiantes que notan el cambio de temperatura al bajar de la guagua. Nosotros que estamos aquí desde ayer lo sentimos menos y así y todo nos metemos dentro del restaurante a desayunar.


Luego nos fuimos caminando hasta el cercano pueblo de Tejeda y por el camino pudimos contemplar el bello espectáculo del Teide asomando su cima nevada en la cercana Tenerife. Hago fotos y no me canso de disparar la cámara. El Nublo, visto en medio de los árboles de la carretera, y el Bentaiga airoso, se ven distintos a cada vuelta del camino. Más abajo, cercano ya el pueblo, los almendros lucen sus flores blancas o rosadas y las casas blancas parecen guardar, celosa, a su iglesia. Arriba, entre los riscos, vemos en contraste con la negrura de las moles rocosas, lo que parece unas hilachas del agua caída días atrás en una semana loca de lluvia que llenaron las presas.

Fue un día precioso gozado segundo a segundo, como debe ser.

Te deseo un buen día.

domingo, 7 de febrero de 2010

Fedra

Hola a todos.
Ayer vi cumplido uno de mis deseos que aguardaba paciente a hacerse realidad. Fui al teatro ayer, por fin y por vez primera, a la representación de una obra clásica del mundo griego. Ésta, de título Fedra, la ponía en escena Ana Belén con texto actualizado de Juan Mayorga. Fue escrita en su versión original cuatrocientos años antes de Cristo y en ella Eurípides nos cuenta de pasiones antiguas que son pasiones actuales porque son las de siempre: nos presenta el drama que sobreviene por el amor desmedido de Fedra hacia su hijastro Hipólito, el hijo de su esposo Teseo y nos muestra la lealtad del joven que no quiere mancillar el lecho paterno; nos habla de la ira del padre, ciego al creerse engañado pues a tal punto le lleva las mentiras de la infiel esposa.

Me gustó mucho la puesta en escena y aunque no pude escuchar en su totalidad los diálogos iba siguiendo la trama por lo que sabía de la obra. Estupenda Ana Belén en su papel de Fedra, y magnífico Fran Perea en su difícil papel de Hipólito sin desmerecer al resto del elenco. Para mí el personaje de Hipólito es el que tiene mayor grandeza pues no solo ha de rechazar los amores ilícitos que se le ofrece sino que más tarde ha de intentar convencer sin éxito a su padre de su inocencia. Sobre las tablas, desde el principio hasta las escenas finales de su muerte, su figura me pareció real.

Te deseo un buen día.

viernes, 5 de febrero de 2010

Copla española

Hola a todos.
Con cierta frecuencia me vienen a la cabeza canciones que oí, canté o al menos tarareé cuando joven. Alguna de ellas se me instala durante un tiempo en la punta de la lengua y me veo sin proponérmelo dándole la lata a quienes están a mi lado con un cantar del tiempo de mi bisabuela. Tal me ocurría con una copla española, que seguramente ustedes habrán oído y que yo oí más de una vez por la radio cuando adolescente, y con cuya letra, harto cambiada, suelo dar la lata a cada rato, como los borrachos majaderos, a quienes están a mi lado.

Yo canto: "el tiempo pasaba y nadie sabííía/ que aquel latonero era su amor/ pero se ha sabido que le ha regalaao/ una lavadora y un buen coladooor". Y por si fuera poco lo anterior sigo yo con la copla de esta manera: "...a beber agua fresquita/ me voy a la fuente el berro/ si la sed no se me quita...".

Debo decir en mi descargo que de las casas vecinales salía en aquellos tiempos esta canción española y otras tantas, tantas veces, con un volumen suficiente para que se enterara todo el barrio, de las 'arradios' que fueron llegando poco a poco, mucho antes de que la televisión se adueñara de los hogares canarios.

Ahora he conseguido por fin (gracias a internet) desentrañar el misterio de la letra de esta copla, para mí tan querida. Comparen ustedes lo que yo cantaba con la versión original:


El tiempo pasaba y nadie sabía
de aquella coplilla quién fue el cantaor.
Más no faltó alguien que ya suponía
a Pepe Serrano, un buen matador.

. . . .

A beber agua fresquita
me voy a la plaza nueva.
A beber agua fresquita
de la fuente de avellanos
que es la que la sed me quita.
Si me la da mi Serrano.

En fin, que una equivocación la tiene cualquiera.

Si quieres escuchar esta bonita copla, que se titula "Calle Ervira", y que estoy seguro te gustará, pincha aquí:



Te deseo un buen día.

miércoles, 3 de febrero de 2010

San Blas

Hola a todos.
La plaza de Santo Domingo en el barrio fundacional de Vegueta lucía hoy día de fiesta. Unos puestos callejeros con venta de turrones y otros con golosinas y chucherías para los niños competían con varios vendedores del cupón de ciegos en atraer la atención de quienes se dirigían al templo. En un rincón, como resguardándose del frío, un ventorrillo vendía, a cambio de la voluntad, los cordones y las estampitas de San Blas y en él varias personas aguardaban su turno para hacerse con ellos.

Vine con la creencia de que era cosa del pasado la devoción y la fe a San Blas y quería por otra parte saber el porqué este santo era salvaguarda segura a los males de garganta. Porque sabía que era costumbre -y me confirman que lo sigue siendo- el traer a los niños hasta Santo Domingo, y a la ermita contigua de San Blas, para pedir por la salud de los infantes. Hace años cuando el uso de las medicinas era más problemático, y posiblemente hoy también, el cordón del santo al cuello era remedio buscado para que la faringitis y otras afecciones no hicieran su molesta aparición.

¿Pero porqué este santo y no otro? Y además, ¿quién fue este santo varón? Acudamos a la red.

Blas fue médico y obispo de Sebaste en la antigua Capadocia, hoy Turquía. Hizo vida de ermitaño en una cueva del monte Argeus y murió decapitado por no renegar de la fe de Cristo. Según la tradición era conocido por su don de curación milagrosa, que aplicaba tanto a personas como a animales. Según una leyenda los animales se le acercaban en su cueva para que los sanase. Y salvó la vida de un niño que se ahogaba al trabársele en la garganta una espina de pescado. Este sería el origen -nos dicen en Wikipedia- de la costumbre de bendecir las gargantas el día de su fiesta el 3 de febrero.

Por tanto queda cubierta para mí la curiosidad de hoy, y ¿por qué no?, tal vez la tuya.



Cristo atado a la columna, ermita de San Blas.

San Blas y la Candelaria, iglesia de Santo Domingo



Detalle de la fuente, plaza de Santo Domingo.

Te deseo un buen día.