Indignación y tristeza

Hola a todos.

En esta marea de la crisis galopante en la que nos ha tocado navegar contracorriente me ha llegado, como a otros muchos padres le llegó antes y a otros tantos les llegará no pasado mucho tiempo, la visión de la indignación y la tristeza retratada en la cara de una de mis hijas. Sabía ella que la iban a despedir de su trabajo. Por circunstancias que no voy a detallar. No era eso lo peor: lo que no sabía era la ruindad con que lo harían. La llamó el jefe -que es un mandado ya que no es el dueño (al parecer) de la empresa- y le hizo firmar unos documentos. Documentos preparados por otros mandados que tienen muy posiblemente la titulación de abogados y que están al servicio -vil metal- de los poderosos. Mi hija firmó, llorando, (muy mal hecho pues nunca debió hacer ninguna de las dos cosas) y aun necesitaba llorar cuando lo contaba en casa. Le acusaban en el documento de cosas que no había hecho para poderla despedir con la ley en la mano sin coste alguno, prometiendole, que de esta forma, la volverán a llamar cuando haya un nuevo trabajo para ella: en caso contrario no la llamarían nunca jamás.

Con la ley en la mano: ¡qué ironía! Con La ley de Reforma Laboral que nos ha traído el Partido Popular para generar empleo (eso sí, cuando la situación mejore, que nos dice el Presidente del Gobierno) y que deja indefensos a los pocos trabajadores que van quedando en este país. Ya no es bastante con mandar al paro a las jóvenes y a los jóvenes que tratan de encontrar un hueco en esta aperreada vida. Ya no es bastante con dejar sin empleo a tantas y tantos desgraciados. Ahora, con la bendición del Gobierno, el empresario puede menospreciar la inteligencia y humillar al empleado.

Llegó el paro a mi casa de la forma más cruel. Por ello he visto en la cara de mi hija indignación y tristeza. Como la habrán visto otros muchos padres y como la verán por desgracia otros muchos más.

Te deseo un buen día.

Hablar en plata

Hola a todos.

Hace ya bastantes años, cuando queríamos enfatizar que lo que íbamos a decir era verdad decíamos aquello de 'hablando en plata...' Algo que fuera de plata era para nosotros un asunto o un objeto que no podía ser engañoso. Eran tiempos en que una palabra dada valía tanto como un documento firmado ante notario. No sé si me equivoco pero creo que hoy esta forma de hablar ha quedado en desuso aunque bien es cierto que la mayoría de la gente habla con sinceridad y afirmando lo que es cierto. Por ello yo quiero hoy (y me perdonarán que mezcle churras con merinas ¿se dice así, no?) hablar en pesetas. Verán ustedes: en estos tiempos aciagos para la mayoría, con tantas reformas y tantísimos recortes, hay noticias que, si no las leo en pesetas, se me escapan. Pondré un sólo ejemplo y añadan ustedes unos cuantos más que conozcan: nos dijeron hace poco los medios de comunicación que el señor Rodrigo Rato (el mismo señor Rato que fue ministro del Gobierno de España y Presidente del Fondo Monetario Internacional, según creo, ese Fondo Monetario que no se enteró de la crisis que nos venía) había ganado en el año 2011, aparte de otras fruslerías, dos millones trescientos cuarenta mil euros al frente de un nuevo banco -Bankia- nacido de la fusión de Cajas de Ahorro en dificultades. La noticia me rebotó como tantas otras hasta que, cuando puse la cifra en pesetas, me revolvió las tripas de inmenso malestar. En tiempos de crisis, en tiempos de ajustes, en tiempos de congelación de pensiones, en tiempos de bajada de sueldos a funcionarios, en tiempos de millones de desempleados, este señor ex-ministro y ex-presidente ganó el pasado año pesetas 389.109.240 (trescientos ochenta y nueve millones ciento nueve mil doscientas cuarenta pesetas).

Hablando en plata, si la noticia es cierta, éste es un ejemplo más del atropello que la mayoría estamos sufriendo en este país llamado España. Si no fuera así, por favor díganmelo, para que mi barriga y yo con ella dejemos de sufrir.

http://www.laprovincia.es/economia/2011/12/30/rodrigo-rato-cobra-234-millones-bankia-bfa/427091.html

Te deseo, pese a todo, un buen día.

Tablas

Hola a todos.
El Caballero y la Muerte, o la Muerte y el Caballero ¿qué más da? han hecho tablas en la penúltima partida. A pesar de las estrategias de ambos jugadores, a pesar del enroque de uno, del ataque en el último momento con la dama del otro, a pesar de las posiciones avanzadas de peones y de alfiles, y de la colocación de las torres... ninguno de los dos pudo dar el jaque mate y por ello ambos dos abandonaron la partida en unas tablas que nadie del público expectante quería.

La noticia corrió de boca en boca: Y grupos de aficionados y medios de comunicación de masas saturaron durante días las tertulias con sus conversaciones. Cada uno hizo su propio comentario sin leer, ni tan siquiera de pasada, el comentario del otro. Hay quien aduce estrategia del jugador que iba -al parecer- con ventaja. Otros quieren ver a quien iba en desventaja como causante del inesperado giro de la partida.

Quienes saben de este deporte de salón no se pronuncian aunque en su fuero interno todos ellos, con alegría o con pena según la visión de cada cual, dan por ganador al Caballero o a la Muerte - a la Muerte o al Caballero- pese a la contundencia de las tablas.

Nosotros, simples aficionados, seguiremos atentos a las próximas partidas que serán, no nos cabe dudas, de lo más interesante.

Mientras llega el final del campeonato, y como siempre, te deseo un buen día.

Jugada

Hola a todos.

Se juega en nuestro país una interesante partida de ajedrez. No es tan dramática por supuesto como aquella que jugaba el Caballero medieval contra la Muerte en la película El Séptimo Sello del genial Ingmar Bergman. En la película, el protagonista, hombre angustiado y llenos de dudas, pide a la Muerte una prórroga en la esperanza de que ésta le aclare sobre los misterios de la vida: la muerte y la existencia de Dios.

En la partida que se juega en la piel de toros (en el Tribunal Supremo) los protagonistas son otros y distintas las verdades que se dirimen. Como aficionados que somos a este juego-ciencia estamos asistiendo desde hace algún tiempo a movimientos de peones, de alfiles, de torres y de caballos que, amparados por los peones, se mueven lanzando acometidas en la única dirección de dar jaque mate al rey contrario.

De momento la partida está harto interesante. El Caballero o la Muerte ¿quién lo sabe? ha dado jaque al rey contrario. Pareció en un principio que era la jugada definitiva y que la Muerte o el Caballero ¿quién lo decide? había recibido un jaque mate. Pero éste, Caballero o Muerte, ha encontrado una posibilidad de escapar a su destino y se aferra a ella. En los próximos movimientos está, sin duda, la clave de la última jugada. Seguiremos atentos los acontecimientos.

Te deseo un buen día.

Héroes

Hola a todos.

En estos tiempos en que las diarias noticias nos apabullan llenándonos el alma de inquietud y desasosiego cuando no de infinita tristeza, noticias que nos hablan de malestar y de maldad, de fraude y malversación, de despidos y quiebras, de eres y desempleados y de miserias nos vino el otro día una noticia que al estilo de las gestas de los antiguos fue una mezcla moderna de tragedia y de epopeya.

Lo recordarán ustedes. Sucedió en A Coruña, en una de sus emblemáticas playas, en la de Orzan, por donde pasean los delfines cercanos a la tierra, en donde las olas son plácidas o son altaneras según les dicten los dioses de las profundidades marinas, en donde los temporales empujan las olas que escupen su espuma llevadas por los vientos que ensombrecen el alma. Sucedió en A Coruña en donde un joven estudiante atrevido, eslovaco y con beca Erasmus, Tomás Velicky, desafió a su destino desafiando a la bravura del mar enfurecido. La tragedia estaba servida. La épica no se hizo esperar.

Otros jóvenes, esta vez agentes del orden, guardianes de nuestras vidas, ángeles custodios que velan por nuestra seguridad, fueron en ayuda del joven alocado. Se lanzaron al mar para salvarlo y ellos, en su heroicidad, perecieron en el empeño. La tragedia se volvió epopeya. Los poetas, no me cabe duda, cantarán por siempre en su poesía épica el arrojo de estos héroes nuestros. De nuestro tiempo. Que Dios los tengan en su gloria eterna.

Don JAVIER LOPEZ LOPEZ, 38 años

Don RODRIGO MASEDA LOZANO, 35 años

Don JOSE ANTONIO VILLAMOR, 34 años

héroes nuestros, descansen en paz. Amén

Te deseo un buen día.