viernes, 9 de noviembre de 2012

Sensibilidad

Hola a todos.
Oír frases inadecuadas a los políticos puede resultar de lo más hilarante si no fuera que hay personas que sufren, y mucho, por la crisis. Por supuesto que todos los políticos no son iguales: los hay que son politicamente correctos y otros que son todo lo contrario. El caso de Fátima Báñez, ministra de empleo, ¿de qué empleo? podríamos preguntarnos a la vista del elevado número de parados, es un caso aparte. Lo es, desde luego, después de que dijo que se iba a dirigir en súplica a la Virgen del Rocío para generar empleo. No con estas palabras, que no son textuales, pero sí con esa intención. Y se quedó tan fresca, al parecer. Hoy ha vuelto a liarla en  mi opinión al hablar del conflicto que tienen los sindicatos con la compañía Iberia por pretender ésta el despido de 4.500 trabajadores. Dijo la señora Fátima Báñez, ministra ella, que este caso lo tendrían que tratar Sindicatos y Empresa con mucha sensibilidad para acogerse a lo que dice la Reforma Laboral. O más o menos. Y uno, y más de uno, nos preguntamos que sensibilidad puede tener el personal con el anuncio de marras.

A lo mejor la señora ministra quiere que las familias de los trabajadores que pueden ser despedidos tengan la misma sensibilidad de aquellos que por no tener trabajo (y por tanto no tener comida) tienen que ir al comedor de Caritas; o de aquellos otros que han perdido sus casas por los desahucios (triste sensibilidad la de los que se han suicidado por este motivo) Señor; o de los funcionarios que no tendrán la paga de Navidad para poder comprar los turrones ni Reyes para sus hijos en estas fechas; o la sensibilidad a flor de piel de quienes quieren incorporarse al mundo del trabajo después de haber estudiado duro y no pueden y tienen que emigrar.

Sensibilidad pide doña Fátima y también flexibilidad a Iberia para mandar poca gente al paro. Y no se inmuta. No sufre ni se sonroja, creo, pensando que la Reforma Laboral que propicia el despido barato en España la ha traído el Partido que está en el Gobierno del que ella es ministra, nada más y nada menos que de Empleo y Seguridad Social.

Su frase podría ser hilarante. No lo es, porque hay gente, mucha gente, que sufre.

Te deseo un buen día.

2 comentarios:

Francisco Espada dijo...

Parece de chiste lo de la ministra de empleo, pero de chiste macabro.

Chelo dijo...

Sí, esa señora y todos son de chiste pero macabro como bien dice Paco