martes, 4 de marzo de 2008

Una hermosa fuente





Hola a todos. Es la mañana del domingo y nos vamos Loli y yo partiendo de la calle Reloj, Espíritu Santo arriba hasta dar con la fuente del mismo nombre. La calle, en este tramo sólo para peatones, es un encanto porque es estrecha y con casas de la antigua Vegueta a ambos lados, diría yo que las mismas casas que construyeron los castellanos al incorporar Gran Canaria a la Corona de Castilla. Arriba, al fondo de la calle que parece se estrecha aún más, una alta palmera pone un contrapunto al colorido de las fachadas de las viviendas. Junto a la palmera, la fuente. Decía Domingo J. Navarro en sus Memorias: "Dando la vuelta a la encrucijada del Espíritu Santo se veía empotrada en la pared de la izquierda una desaseada fuente de tres caños con hedionda balsa de cantería. Toda la calle en contorno era un fangal, porque en aquella fuente se reunían a beber y lavarse casi todos los caballos del barrio de Vegueta". Esto que escribía del año mil ochocientos y tantos no tiene nada que ver con la fuente que yo conocí a mitad del siglo XX y que juraría que en nada ha cambiado hasta hoy. Venía yo como ya tengo dicho siendo un crío por esta zona y me encantaba el lugar, no sólo la fuente y la plaza sino el contorno formado por las calles y casas cercanas a la Catedral y este encanto no me ha defraudado al ser mayor. Es precioso el ver como las palomas beben y se mojan con el agua de la fuente y es una caricia para la vista la sencillez de la composición en piedra de los arcos y del templete bajo el que se encuentra el surtidor. De éste baja el agua a cuatro bocas de faunos que la dejan salir a las pilas de cantería, una en cada lado del cuadrado de la fuente, inaugurada en 1867 siendo su constructor Manuel Ponce de León. Y leo que el coste de esta obra se pagó con una suscripción popular.

Junto a la fuente está la ermita del Espíritu Santo, casi siempre cerrada, y que "con un edificio más propio de una zona rural que del mismo corazón de Vegueta, dada la enorme sencillez de sus líneas, se construyó en 1615", según reza la placa puesta por el Ayuntamiento. También dice esta placa que en la ermita "se venera la imagen del Cristo del Buen Fin cuya cofradía, instituida en 1941, y revestida de largas capas rojas saca en procesión de penitencia cada madrugada del Viernes Santo, constituyendo uno de los momentos más sugestivos de la Semana Santa". Procesión a la que haré lo posible por asistir. Completa el bien cuidado espacio un jardincillo en forma triangular donde además de la alta palmera hay otros árboles y plantas constituyendo el conjunto un deleite para los sentidos.

Te deseo un buen día.

No hay comentarios: