viernes, 11 de febrero de 2011

Can can

Hola a todos.
El domingo pasé un rato estupendo en el Auditorio Alfredo Kraus. Un ratillo pequeño, de alrededor de hora y media, que pasó en un suspiro. No era un concierto más dentro del 27 Festival de Música de Canarias sino que era el Conciertazo llevado en volandas, ya lo habrán adivinado ustedes, por Fernando Argenta. El auditorio estaba casi lleno; solo unas entradas del último anfiteatro estaban sin vender y les aseguro que visto desde arriba, desde donde yo me encontraba, el espectáculo era soberbio. Niños y niñas de todas las edades acompañados por padres y abuelos esperaban ansiosos y con bullicio para ver que les traía el mago de la música clásica.

Y no salimos en verdad defraudados, porque al buen hacer de la Sinfónica de Las Palmas con Pascual Osa al frente, se unía la simpatía de Argenta que hacía a los niños vibrar entre pieza y pieza. Había que ver a los pequeños intentando ser los elegidos para subir al escenario cuando era requerido uno u otro, para luego salir vestido de Guillermo Tell, en la Obertura de Rossini, de bella durmiente y príncipe en La Bella Durmiente del bosque de Chaikoski, o de señoritas del Moulin Rouge en el Can Can de Offenbach en su ópera bufa Orfeo en los Infiernos.

Desde mi butaca oía aplaudir a los críos al final de cada pieza y miraba de reojo a mis nietos que aplaudían con ganas y atendían fijamente a cada actuación de la orquesta. Una polca de Strauss, una obertura de Mozart, el preludio de la ópera Carmen de Bizet y la Marcha Radetzky como colofón ( con sus palmas y todo) hicieron los honores a un público entregado. Y yo me sentí feliz al comprobar que hay cantera suficiente para la música de siempre.

Te deseo un buen día.

3 comentarios:

Francisco Espada dijo...

Felicidades por haber disfrutado de la gran música.

Felipe Tajafuerte dijo...

No me hubiera importado nada ocupar una de las plazas libres del último anfiteatro.
Enhorabuena por haber disfrutado de eses concierto y además en tan agradable compañia.
Buen fin de semana

Chelo dijo...

Me encanta eso de que a los niños se les lleve a los conciertos, así podrán apreciar la música cuando sean mayores. Feliz semana