El Blog de las mil cosas que uno puede hacer, pensar y sentir cuando se libera de la rutina laboral.
domingo, 30 de marzo de 2008
Crece un castillo
sábado, 29 de marzo de 2008
Comidas de aúpa
Hola a todos. Recuerdo que en el principio de la Cuaresma o por ahí en los Salesianos ponían un catafalco en la iglesia al pie del altar de María Auxiliadora que la verdad no sé si impresionaba o causaba curiosidad al niño que yo era. En la Semana Santa se acostumbraba a cubrir las imágenes con unos paños de color morado, y lo que era más sorprendente es que a los críos nos tenían dos o tres días sin casi poder hablar, jugando a los boliches en el patio y no al fútbol o a otros juegos de correr y gritar, y además, para llamarnos, en lugar de la campana de siempre hacían sonar una carraca que es algo que da vueltas al final de un palo y produce ruidos sordos. Se acostumbraba en estos años suprimir la carne en las comidas durante estos períodos de Cuaresma hasta el Domingo de Resurrección, supongo que un par de días a la semana, salvo que pudieras hacerte con la bula pagando el óbolo correspondiente.
Esta última costumbre -la de no comer carne- sigue como tradición al menos en el Viernes Santo día en que en la mayoría de las casas canarias se come pescado, y lo más probable es que el pescado se coma con un buen sancocho. En la azotea de casa de Yeya, mi suegra y bisabuela de la familia, acostumbramos a celebrar su onomástica, la Virgen de la Soledad, comiéndonos un apetitoso sancocho en el que no puede faltar por supuesto el rico cherne, las papas y la batata, el mojo picón y la pella de gofio, con unos vasos de vino. Se hace esta rica comida en Canarias como queda dicho sancochando papas, batatas y pescado y se amasa el gofio, y se sirve también si se desea una ensalada. Como no podía faltar este año el encuentro familiar con sancocho incluido, a él nos dedicamos el Viernes Santo pasado con profesionalidad de gourmets.
Tras leer hace poco "Memorias de un Noventón" de Domingo J. Navarro y en él la receta en verso de como hacer un puchero canario quedé con el regustillo de comerlo y acordamos el hacerlo en esta semana. Así que hoy nos volvimos a reunir, preparamos el rústico comedor en la azotea, Yeya se ocupó de mil amores junto a sus ayudantas de preparar el guiso, del que cuando ya estaba listo nos servimos en primer lugar una tacita de caldo con yerbahuerto como aperitivo, acompañado de chorizo y queso de oveja con pan bizcochado. El puchero canario no lleva como el sancocho pescado sino carnes de vaca y de pollo, que se trocean para ponerla en una olla grande con agua a la que se le añade batatas y papas,garbanzos, cebolla, una hoja de laurel, un poco de azafrán, y verduras en cantidad: calabaza, col, habichuelas, calabacín, piñas y zanahoria, y para terminar de dar gusto se añaden unas peras. De este rebotallo nace un suculento y aromático plato que casi no necesita del vino aunque éste también puede servirse para acompañarlo.
Lo dicho, a no perder el tiempo con comidas precocinadas ni cosas por el estilo, y rescatemos la cocina de nuestras abuelas que bien se lo merecen.
P.S. Pancho Guerra en su obra "Contribución al Léxico Popular de Gran Canaria" nos dice que el sancocho es "vianda soberana del mantel isleño, compuesta de un cherne salpreso y papas sancochadas, todo lo cual se rocía luego con mojo colorado", y del puchero que "es la comida rural o urbana de los días de fiesta grande, de la del patrono del pueblo. Se come con pan, al contrario de lo cotidiano, que se come con gofio".
Te deseo un buen día.
viernes, 28 de marzo de 2008
Biblioteca del Estado
Te deseo un buen día.
miércoles, 26 de marzo de 2008
Madrelola
Madrelola no se preocupaba por ello, y si se preocupaba nunca se quejó al menos delante de mí. Era pobre y trabajó durante años como cocinera en casa de unos señores ingleses porque tenía muy buena mano para la cocina y así sacaba a su gente adelante. Era mujer elegante y conservó su belleza hasta la vejez. Yo iba a visitarla algunas veces y ella acostumbraba a venir a casa de mi madre los domingos en que nos hacía el puchero o la sopa o lo que fuera en aquellos años en que se comía carne solamente una vez en semana. Pasaba el día con nosotros y cuando regresaba a su casa, Sultán nuestro perrillo, la acompañaba hasta la parada trotando hasta que subía en la guagua. Tenía mi abuela manos de oro para hacer ganchillo. Sus últimos años los pasó en casa con nosotros, hija, nietos y biznietos, y pasaba horas sentada dándole a la aguja para hacer con el hilo verdaderas filigranas. Hacía paños a los que, poniéndole almidón para endurecerlos, le daba forma de volantes a los que llamábamos bailarinas. A Loli y a mí nos regaló una preciosa colcha de cama de matrimonio que conservamos, hecha poquito a poco, roseta a roseta hasta acabarla.
El ganchillo, conviene aclarar para la gente nueva, no es lo mismo que el bordado ni éste lo es del calado. El ganchillo se hace con una aguja terminada en un gancho con la que se va haciendo cadenetas hasta conseguir la pieza deseada, el bordado consiste en pasar hilos de diferentes colores haciendo puntadas en la tela hasta lograr cuadros de flores o de cualquier otro motivo decorativo, y el calado se hace sacando hebras de la tela que va cogida a un telar de madera dejando florituras en ella. Mi abuela era una artista haciendo ganchillo, te lo aseguro, y es una pena que estas artes se vayan perdiendo entre las nuevas generaciones, aunque en algunos municipios -tal el caso de la Villa de Ingenio- aún se conserva estas tradiciones de nuestra isla de Gran Canaria.
Te deseo un buen día.
lunes, 24 de marzo de 2008
Roquito y su abuelo
domingo, 23 de marzo de 2008
Celebración entrañable
La placita delante de la iglesia es un triángulo sin vegetación alguna donde lo único que se ve es la falta de bancos donde sentarse. Suena la campana llamando a misa. La fachada de la iglesia tiene dos placas: una indicando que está bajo la advocación de la Virgen de Fátima y la otra dando horarios de misas y de asistencia parroquial; dentro es una nave con una puerta pequeña junto al altar que comunica con lo que debe ser la sacristía; enfrente una imagen de la Virgen con unas flores de plástico. En el altar a la izquierda Cristo Crucificado sobre una pared blanca y delante dos atriles para leer la palabra de Dios y la mesa para la Eucaristía. Un cirio pascual grande, cuatro pequeños y flores adornan el altar. Bancos en la iglesia para los fieles completan el mobiliario en una iglesia necesitada de urgentes arreglos.
En esta iglesia, humilde y pequeña, tuvo lugar la entrañable celebración del Bautismo de una pequeñina nieta de una prima nuestra durante la misa dominical, y no al final de ésta, en la que el sacerdote fue desgranando las promesas bautismales a las que respondían padres y padrinos. La niña fue acogida como un miembro más de la Iglesia, y más tarde fue ungida con el óleo sagrado y por último recibió las aguas del bautismo. Acompañaban a la pequeña padres y abuelos y otros familiares y además los fieles que asistían a la Santa Misa. En ésta, en el momento de la consagración suben al altar una veintena de niños y niñas que se sitúan alrededor del sacerdote quien luego, en el rezo del Padrenuestro, pide enlazar las manos formando un círculo alrededor del altar...
Te deseo un buen día.
sábado, 22 de marzo de 2008
Semana Santa en Las Palmas
Justo en el minuto en que el Jueves deja paso al Viernes Santo sale de la ermita del Espíritu Santo, fundada en el año 1615, la imagen de Cristo crucificado con un silencio total, imponente, de los fieles agrupados en la pequeña plaza y en las calles sólo roto por la voz del sacerdote. Sale a manos de ocho cofrades de la Cofradía del Santísimo Cristo del Buen Fin ya que la altura de la puerta de la ermita no permite sacarla sobre su trono.
Comienza el Viacrucis y dejando atrás la fuente y plaza comienza a bajar por la calle Doctor Chil haciendo paradas para el rezo de los misterios. La procesión va despacio por esta calle de la Vegueta antigua y vemos en algunos balcones de las casas colgaduras moradas. La noche es agradable con algo de viento pero sin frío.
Dejamos atrás el Palacio de Justicia y la iglesia matriz de San Agustín y subimos por la calle del Espíritu Santo. Entre uno y otro misterio sólo se oye el ruido de las pisadas y el desplazamiento del trono sobre la calzada. En cada misterio el oficiante dice una corta plática y rezamos el Padrenuestro y el Avemaría. En la obscuridad de la noche Cristo destaca contra la fachada de la Catedral. Cuatro cirios encendidos iluminan al Salvador.
Los cofrades portan candiles con velas encendidas. Sus ropas son de color rojo y alrededor del cuello un cordón dorado termina en un bordón. También es dorado el bordado de sus mangas con la Cruz y la Corona de Espinas. Sobre sus pechos una medalla ricamente trabajada como símbolo de la Cofadía. Me enseñan una y me hacen ver que tiene la Cruz y junto a ésta la lanza que perforó el costado de Cristo y el hisopo en el que Le dieron a beber vinagre en el Gólgota. Una paloma símbolo del Espíritu Santo vuela sobre la medalla. Y en sus manos las cruces que han ido retirando de las paredes en las paradas del Viacrucis.
Termina el Via Crucis sobre la dos de la madrugada. Los cofrades bajan del trono con mimo la imagen que, inclinada por un momento, parece va a caer al suelo. Se oye un suspiro cuando se recupera posición y pasa el susto, y dentro de la pequeñísima ermita, siempre cerrada, queda guardada la imagen del Cristo del Buen Fin hasta el próximo año.
A las once de la mañana del Viernes Santo sale desde la Catedral de Las Palmas la procesión de "La Mantilla" con los tronos del Crucificado y de la Dolorosa, mientras en el atrio del templo suena música religiosa.
Recorre las calles cercanas y termina en la puerta de la Catedral, en la Plaza de Santa Ana, frente al Ayuntamiento, y ante el Obispado.
Entran las imágenes mientras la Banda Municipal de Música interpreta la Marcha Fúnebre de Chopin.
Y ya dentro del Santo Templo el órgano de la Catedral suena acompañando a la Madre.
Ya en la noche del Viernes Santo, una vez finalizada la magna Procesión del Santo Entierro, sale de la iglesia de San Francisco la Virgen de la Soledad de la Portería en procesión de corta duración por las calles de Triana cercanas a la iglesia...
... donde queda el bello trono con la imagen de la Virgen vestida con traje de luto y pañuelo en mano por su Hijo Jesús.
Te deseo un buen día
jueves, 20 de marzo de 2008
Chris Botti, trompeta
martes, 18 de marzo de 2008
Lukini
Hola a todos. A Lucas Segura lo tiene Dios en su regazo desde hace años. La Parca quiso llevarlo cuando aún era joven sin llegar a la edad de la jubilación dejando entre sus compañeros el vacío que deja un hombre bueno. Entró en DISA justo un mes más tarde de la fecha en que yo lo hice bien que él fue a trabajar en el almacén que tenía la empresa en Guanarteme y yo a las oficinas en Triana. Años después coincidimos y desde ese momento fue como un hermano que se preocupa por el otro más pequeño. Los más allegados le nombrábamos cariñosamente Lukini haciendo un diminutivo de su nombre de pila y él nos correspondía con su cariño enorme a la amistad. Porque Lucas era amigos de todos y a todos apreciaba con ese sentimiento que termina siendo mutuo. No era hombre de hablar mucho, escueto, ponderado, sin una palabra de reproche hacia nadie. Le gustaba las juergas y era un apasionado jugador de envite cuando el grupo de compañeros íbamos a almorzar a algún sitio y teníamos la partida de este juego canario de sobremesa. No mandaba en su equipo pero sabía las triquiñuelas necesarias para engañar a los componentes del equipo contrario, con las señas y los comentarios propios del juego para engatuzar al oponente y hacer que perdiera las piedras en liza. Cuando por los avatares del juego tenía que hacer el envite se subía a una silla y desde lo alto y con su voz no muy potente pero suficientemente expresiva decía: ¡Envío...! Y cuando se enchispaba un poco y llegaba la hora del canto, entonces, terminaba subiéndose a una mesa y con su canción preferida para estos casos cantaba "Amapolaaa, lindísima amapolaaa..."
Él y su mujer, Lolita, siendo muy jóvenes, aún de novios, comenzaron a ir a los bailes; recuerdo sus anécdotas de cuando iban a bailar a Telde entonces con medios de comunicación algo escasos. Donde no faltaban nunca era a los bailes del Mercantil; tanto en los Carnavales, como en Fin de Año y en la verbena de San Juan allí estaban Lucas y Lolita ocupando una mesa en el salón de baile para ellos y sus hijos y para cuantos amigos se acercaban a saludarles. Le gustaba el whiski con seven up que "está dulcito" y la botella, como su corazón, siempre estaba abierta para los demás. Bailaban ellos estupendamente con muchas horas de experiencia y aguantaban como nosotros, todo hay que decirlo, hasta el amanecer.
Tenía Lucas un don especial para estar en distintos grupos organizando tenderetes. Con uno de los grupos "los papapollos" alquilaron una casa en San Cristóbal para reunirse una vez en semana como si de un club social se tratara e iban a Maspalomas y comían pollo y papas en los chiringuitos de la playa. En otro grupo, éste de Alcaravaneras donde vivía, organizaba una excursión, y una comida anual otro día en la que no podía faltar la enorme tarta de aniversario. Siempre iba con la agenda llena de compromisos que atendía gustosamente. Cuando le hablábamos de estas trapisondas en las que estaba metido nos decía: "Las cosas se hacen pero no se dicen" quitándose importancia como que sus buenas acciones para él eran lo más natural del mundo.
Cuando enfermó y ya veía la muerte cercana decía a otro compañero: ¡Qué pena, con la cantidad de cosas que tengo por hacer!
Descansa en paz amigo Lucas, hasta siempre.
Te deseo un buen día.
lunes, 17 de marzo de 2008
No hay dos sin tres (2)
Llega un momento en que el paseo da paso a una carretera estrecha de tierra por la que algunos coches van y vienen teniendo que ceder el paso unos a otros. Otro cuarto de hora y estoy en el Confital sin ver por ningún lado al resto del grupo lo que me permite seguir haciendo fotografías en solitario de los surferos que intentan volar sobre las pequeñas olas, de las rocas que se adentran en el mar, de la espuma de las olas al llegar a la orilla, de alguna gaviota que me sobrevuela... y mientras, quedo a la espera de los amigos y de que el crepúsculo llegue y ver como se porta la puesta de sol.
Hay bastante gente en la playa. Un camino preparado por el Ayuntamiento de tablas y pequeñas plazas de pavimento hacen el recorrido fácil. En un punto un coche con dos altavoces enormes dan música gratuita para los que están junto a él y para los demás viandantes. Se ven vasos con bebidas y refrescos, y algún enyesque, y gente satisfecha después de pasar un día o unas horas junto al mar. Algunas madres cambian a los pequeños y un pequeño grupo de surferos dejan las tablas y se quitan sus trajes contra el frío y las aletas, y todo ello amontonado forma un bonito cuadro de colores. El sol va cayendo y mientras unos surferos salen llega otro y a aquella hora de la tarde se apresta a entrar en el mar. Sigo esperando y tirando alguna que otra foto a las nubes que no se abren para dejar pasar al sol y el frío se va haciendo notar. Llega por fin mi salvador en la figura de Waldo acompañado por Marimar y Miri y el calorcito del coche se agradece. Nos vamos con otros componentes del grupo y un ratito después damos por terminada la jornada.
Y como no hay dos sin tres, ya estoy esperando a la próxima quedada, la tercera para mí, para volver a pasar un día estupendo.
Te deseo un buen día.
domingo, 16 de marzo de 2008
No hay dos sin tres (1)
sábado, 15 de marzo de 2008
Alonso Quesada
viernes, 14 de marzo de 2008
Mi vecina
Por las inmediaciones de casa vemos algunas veces paseando con su pareja o con su hija, y con un precioso perro blanco, a una dama que tenemos el gusto de contar como vecina. Se trata de doña María Cristina del Pino Segura dama que ha de contar con unos pocos años más que yo pero que con su trayectoria vital bien podría duplicarme la edad. Porque doña María Cristina, -nombre que a mis posibles lectores seguramente le dice bien poco-, era una magnífica artista en su profesión. Si digo que mi vecina es "Pinito del Oro" una luz se encenderá entre quienes lo lean y sean de mi generación y quizás a los más jóvenes también por haber oído hablar de ella a sus padres. Porque "Pinito del Oro" fue la indiscutible Reina del Circo con escalofriantes saltos en el trapecio, actuando sin red, hasta el punto de que Cecil B. de Mille, afamado director de cine la llamó para doblar a su actriz principal en la película "El Mayor Espectáculo del Mundo" haciendo las acrobacias que luego serían el deleite de millones de espectadores. Comenzó a trabajar en el circo siendo menor de edad y recorrió durante años España, Europa y América llevando el nombre de Gran Canaria con orgullo hasta su retirada en 1970 después de sufrir tres caídas casi mortales.
Tuvo esta señora en la Avenida de Las Canteras, cerca de una pequeña plaza que lleva su nombre artístico, una sala de fiestas llamada igualmente "Pinito del Oro". Era la época dorada del turismo en Las Palmas cuando además de esta sala habían otras varias donde turistas y canarios íbamos a pasar ratos inolvidables de baile. Su sala nos acogió muchas veces en tardes de domingo, en los bailes de juventud, porque íbamos a ella por su estupenda pista para bailar, el trato amable de los camareros, el ambiente y los precios asequibles para nuestros bolsillos.
Tiempos para recordar.
P.S. Para conocer más de esta grancanaria de adopción en una hermosa entrevista pincha aquí.
Te deseo un buen día.
miércoles, 12 de marzo de 2008
Elecciones generales
Para mensaje el que vi en un cartel de un candidato al Senado, ya mayorcito el hombre, escrito no por éste, supongo, sino por un gracioso mensajero de la vox populi: "Como salga elegido cobraré un retiro que te cagas". El cartel colocado en un poste en una calle céntrica de Las Palmas me arrancó una sonrisa, me hizo pensar en algún chiste fácil para el blog, y luego consiguió que reflexionara sobre el grado de aceptación de los políticos entre el pueblo. Supongo que la mayoría de nosotros no tenemos ni repajolera idea del trabajo de estos señores, ¡si trabajan claro!, y sólo los conocemos por la imagen que nos dan en la tele (si son de los que salen) y por lo que nos cuentan los medios de comunicación. Y estos medios ya sabemos que arrastran la harina hacia su molino o la sardina hacia su brasero y de ellos lo mejor es no creer la mitad de lo que publican y poner en duda la otra mitad; con lo que nos quedamos en babia y la única referencia válida sería la trayectoria de los partidos políticos porque no tenemos otra alternativa. ¿Porque qué nos dice una cara sonriente en un cartel si no conocemos al candidato? ¿Cómo equivocarnos menos y conseguir el mejor gestor de la res pública? It's the question, que dirían los ingleses...
No faltó para nuestra desgracia la execrable mano terrorista segando la vida de un exconcejal y dejando una familia rota en Euskadi. ¡Allá arriba si que hay que tenerlos bien puesto para ser candidato primero y cargo público después!. Voy a mitad de lectura de un libro de algo más de 700 páginas de la trilogía Verdes Valles, Colinas Rojas, titulado este primero La Tierra Convulsa escrito por Ramiro Pinilla escritor vasco nacido en 1923, en donde se remonta a los orígenes 'antes del tiempo' "de un microcosmo realista y mágico que es el pueblo de Getxo... sobre la colisión entre un mundo que cambia y un pueblo que se resiste a todo cambio". Libro que leo con interés en tratar de descubrir el alma del 'problema' vasco, que por su complejidad mucho me temo no estará nunca a mi alcance.
Te deseo un buen día.
martes, 11 de marzo de 2008
Atapuerca y Antártida
Hola a todos. La tarde del domingo, en día de elecciones, se presenta algo fría así que decidimos ir a un sitio cerrado. Aprovechamos que en el Museo Elder de la Ciencia y la Tecnología en Las Palmas tiene una exposición titulada "Atapuerca y la evolución humana" y vamos a visitarla. Hacía unos años que no íbamos al museo, muy bien equipado en cuanto a curiosidades tecnológicas, y con un cine en pantalla gigante con proyección de documentales que son dignos de ver. La primera impresión ya en los pisos tres y dos donde se expone la muestra es de obscuridad que supongo obedece a un motivo estratégico para que el visitante se concentre en lo expuesto, pero a mí me hubiera gustado algo más de luz. Según el programa que nos entregan "... exposición itinerante de referencia sobre Atapuerca, creada por los investigadores para acercar a los ciudadanos uno de los proyectos científicos más relevantes en la historia de la ciencia en nuestro país".
Te deseo un buen día.
domingo, 9 de marzo de 2008
Santa María de Guía
viernes, 7 de marzo de 2008
Tarea postergada
Estimado Rodolfo: Sé que desde el lugar que ya ocupas junto a la derecha del Padre sabrás disculpar mi pereza en cumplimentar la última tarea que debí hacer justo al jubilarme. La falta de decisión y un estado de ánimo que no deseo para nadie ha hecho que hasta la fecha no te haya escrito esta carta, sincera y emocionada, para agradecer a la Empresa tantos años en los que me dio estabilidad laboral. Lo hago hoy por medio del blog porque considero que todos mis potenciales lectores tienen derecho a saber cuanto debo a la que fue para mí Escuela de Comercio y Universidad. Comencé a trabajar siendo un niño y me jubilé cuando peinaba canas y en todos estos años aprendí, no sólo los rudimentos de las labores administrativas y contabilidad sino, lo que es más importante, el valor de las cosas bien hechas y el valor añadido de la palabra dada. Porque DISA querido Rodolfo es una empresa ejemplar donde lo prometido se cumple a carta cabal y donde tu palabra, por poner un ejemplo, era plata de ley.
Recuerdo cuando entré en Triana de aprendiz y tuve que pegar, en los talonarios en los que se facturaban las cien pesetas del recambio del gas, un timbre de quince céntimos en cada hoja original. Y recuerdo pasar el paño a las mesas y cambiar el agua a las escupideras y poner tinta a los tinteros. Tú, algo mayor que yo, recordarás que en este tiempo no se había popularizado el bolígrafo y el uso de la pluma estilográfica era, según creo, poco frecuente. Aprendí a moverme en la ciudad fuera del casco Triana-Vegueta mientras iba cogiendo soltura con las máquinas de entonces. ¿Recuerdas aquella sumadora grandota en la que se anotaba los dígitos de las cantidades a sumar y luego se bajaba una palanca que tenía en la parte derecha, una y otra vez? ¿Y aquéllas máquinas calculadoras con tres juegos de numeración que tanto servía para multiplicar como para dividir? Para la multiplicación, en uno de los juegos, se ponían dígito a dígito mediante unas pequeñas piezas la cifra del multiplicando; con una manivela, también a la derecha (¡éramos todos diestros!) se iba dando vueltas, mientras la mano izquierda movía de unidades a decenas y centenas y hasta seis u ocho posiciones, hasta conseguir el multiplicador; y como por ensalmo salía el resultado. ¿Y para dividir? Pues lo mismo pero dando marcha atrás.
Recuerdo cuando de Triana nos mudamos a Tomás Morales al edificio que por su porte llamábamos 'piano de cola' cuando tenía un sólo piso de oficinas. Y luego a Juan XXIII. Y recuerdo el almacén de Guanarteme y la factoría de la Isleta. Y ¿cómo no? tengo viva la factoría de Salinetas que quizás fuera la niña de tus ojos. Construida ésta se acabó el trasiego de botellas de butano llenas y vacías desde y hacia Tenerife. Y el venir los bidones de 'rail' llenos de petróleo y gasolinas. Tengo presente el primer surtidor en la calle León y Castillo, junto a la Comandancia de Marina, y en la Alameda de Colón, y en Fernando Guanarteme. Luego vendrían las Estaciones de Servicios y las Agencias de Butano repartidas por toda Canarias cuya enumeración haría interminable este sencillo escrito. Y recuerdo perfectamente cuando tu señor padre, don José Rull, y don Ramón Biosca venían a Las Palmas y nos saludaban dándonos la mano a todos los oficinistas, ¡incluyéndome a mí que era un niño!.
Conocí a cientos de personas, en casi cincuenta años, relacionadas de una u otra forma con la Empresa; compañeros y amigos, compañeras y amigas; administrativos y choferes y peones. Sé que nombrar a alguno irá en detrimento de los demás pero voy a permitirme la travesura de citar a dos que sintetizan lo mejor encontrados en todos ellos. Ignacio Cortadellas y Joaquín Brugada. Don Ignacio fue como un padre para mí y me supo llevar encarrilado cuando lo necesitaba; hombre de gran corazón tenía subordinados fieles porque sabía ganárselos con sus buenas maneras; era afable y con un sentido de la responsabilidad no exento de un toque de 'dejar hacer'; de él se cuenta (cosa que ni afirmo ni desmiento) que al recibir un telegrama en sábado lo guardaba en un cajón diciendo: "Ya verás que disgusto me voy a llevar el lunes". Don Joaquín es el perfecto caballero que nos trataba con amabilidad exquisita siempre que íbamos a Tenerife, primero a Imeldo Serís y luego a la calle paralela a Avenida Tres de Mayo; nos daba el saludo y el agasajo que seguro querían darnos el resto de los compañeros de la isla hermana cuando íbamos por motivo de trabajo o por las fiestas de la patrona Santa Bárbara.
Querido Rodolfo deseo que estos mis sentimientos te lleguen hasta el lugar de privilegio en que ya estás donde seguro no habrá de importarte mi tuteo. En el recuerdo afectuoso, hasta siempre.
Te deseo un buen día.
jueves, 6 de marzo de 2008
Juan de Quesada
martes, 4 de marzo de 2008
Una hermosa fuente
lunes, 3 de marzo de 2008
Reunión familiar
Nos habíamos dado cita aquí en Las Nieves para celebrar... bueno, para reunirnos la familia. Y el restaurante elegido, "Ca´mi hermano", no podía tener nombre más apropiado para ello. Nos reunimos más de cuarenta familiares, desde una pequeñina aún sin dientes de leche, hasta los mayores cercanos a las nueve decenas de años de una vida plena. Hermanos, suegra, hijos y nietos, mujer, sobrinos, cuñadas, primos, todos dispuestos a pasar un rato agradable y a divertirnos de lo lindo.¡Hasta de Tenerife vinieron al jolgorio! Gracias Luzma. Contribuyó a pasarlo bien las variados platos que nos sirvieron en plan "picoteo" donde no podían faltar nuestras queridas 'papas arrugadas', queso, mejillones, pescado empanado, pulpo y langostinos, junto a los refrescos, cerveza y vino a gusto de cada cual.
Durante la comida, y gracias al super8 y a las modernas técnicas de ordenador, fueron proyectados unos cortos de película de 'cuando éramos más jóvenes'. Películas de hace cuarenta años, cuando aún la mayoría de los presentes no habían nacido, con escenas de la familia y vistas de Las Palmas y algunas de la isla que nos permitió vernos con la 'tira' de años menos. Mi hermana tuvo la ocurrencia de regalarme un leontina, precioso reloj de bolsillo que desde ahora llevaré con orgullo como algo inapreciable. Mis sobrinos siguiendo el ejemplo de su madre me regalaron un precioso cuadro al que ya encontré sitio en casa y un libro subtitulado la "Odisea de la Antártida" donde se narra la superación del hombre, que en forma individual o en grupo, siempre se crece ante la adversidad, y en cuya primera página leo esta entrañable dedicatoria: "Lo importante del viaje no es el destino: es el trayecto. Con cariño. Agaete 1/3/08".
En resumen un día estupendo, unas horas agradables, un encuentro para repetir ¿qué más podemos pedir? Gracias a todos.
Te deseo un buen día.