Mercedes Pinto

La utopía es sólo una
verdad prematura.

Carme Chacón
Ministra de Defensa


Hola a todos.

Por una feliz coincidencia me encuentro en el Día Internacional de la Mujer empezando la lectura de un libro de Mercedes Pinto. Esta poeta y periodista, que en este año ha sido el centro de atención con motivo del Día de la Letras Canarias, nació en la Ciudad de la Laguna, Tenerife, en 1883, y recorrió hasta su muerte acaecida en 1976 no menos de seis países de América del Sur desarrollando en todos ellos una gran actividad como oradora y escritora. El libro que tengo entre manos está prologado, con una extensa semblanza de la biografiada, por Alicia Llarena, en la que encontramos no sólo su perfil literario sino su decidido empeño en la lucha en favor de la mujer y de los desfavorecidos.


Así podemos enterarnos de que Mercedes Pinto, hija de una familia acomodada y que había ido joven a la península por motivos familiares, hubo de salir al exilio por motivos políticos. Su conferencia pronunciada en la Universidad Central de Madrid titulada "El divorcio como medida higiénica", además de otras actividades como por ejemplo el acompañar a Unamuno en su destierro a Fuerteventura, la puso en el punto de mira de la dictadura de Primo de Rivera. Ya en América, sigo leyendo, "Mercedes fue la primera mujer oradora del gobierno de Uruguay, y pronto empezaron a conocerse en la prensa sus artículos sociológicos, las conferencias que impartía en calles, teatros, organizaciones literarias, a lo largo de toda la república".


Su quehacer literario fue intenso. Tiene en su haber sólo dos novelas, una de ellas (Él) llevada al cine por Buñuel, tiene poesías, obras de teatro y además su propia compañía teatral y por supuesto numerosos artículos periodísticos. Una recopilación de estos artículos, ciento sesenta y uno escritos entre 1973 y 1976 en los tres últimos años de su vida para la revista Excelsior de México, son los que tengo la oportunidad de leer. A través de estas "Ventanas de colores" podemos encontrar "anécdotas personales, vivencias compartidas con gente de la calle, pronunciamos pedagógicos y una buena dosis de sociología, y evocaciones cuyos aromas nos trasladan al pasado insular -su inolvidable infancia y juventud en Tenerife y Gran Canaria- para gozar con el recuerdo de costumbres, hombres y paisajes de aquella época".

Oportunidad pues para ensanchar los conocimientos a través de la lectura de esta mujer que sin duda abrió caminos.

Te deseo un buen día.