Hola a todos. Siento calor. La tarde ha sido desapacible con rachas de viento fuerte y lluvia. A la lluvia la soporto y quiero porque es beneficiosa no sólo para el campo sino también para la ciudad. El viento me causa desasosiego y ante él mi estado es lo más parecido al de miedo. A esta hora de la noche en que escribo el viento y la lluvia han cesado y de la calle parece subir el calor sofocante de un día de verano. El tiempo atmosférico, ése que dicen que está cambiando, ha protagonizado el cambio de estación. Al final del verano tuvimos en la isla una espectacular tormenta eléctrica con abundancia de relámpagos y truenos acompañada de lluvia, y hoy, empezando el otoño esta borrasca inesperada. Cabe preguntarnos como será de lluvioso el otoño y el invierno que se avecina. ¿Será tan seco como el pasado en que solamente llovió una vez, en noviembre, cuando por las lluvias quedó fuera de servicio, sine die, el ‘puente’ entre Schamann y Escaleritas? ¿Vendrá bondadoso con el agua necesaria para llenar presas y estanques? Este buen comienzo indica que sí, ya veremos.
Según parece el mal tiempo de hoy afectó principalmente a Gran Canaria y según pronostican para mañana habrá cambios a mejor. Como anécdota cabe reseñar la caída de una torre de alta tensión en la Autopista del Sur lo que nos da idea de la fuerza del viento. Esperemos que los daños se arreglen prontamente y que no hayan habido males mayores.
Te deseo un buen día. Sé feliz.
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