martes, 1 de julio de 2008

Saulo Torón, versos humildes

Hola a todos. Tomo prestado en la Biblioteca Pública el libro Poesía Completa de Saulo Torón. En el prólogo de Juan Manuel Bonet escribe refiriéndose al poeta: "Durante muchos años, este nombre, sonoro sobre el sonoro Atlántico, no fue para mí sino eso, un nombre. Un nombre en las antologías y en los manuales; el nombre de un poeta allá lejos, en su orilla". Me gustaría saber si el prologuista sabía, o suponía al menos, que para la mayoría de los nacidos acá en la orilla de Saulo Torón, este nombre, era y sigue siendo sólo eso, un nombre. El nombre de una plaza recoleta en la emblemática playa de Las Canteras. Todo lo más sabíamos que era un poeta y a lo sumo algún enterado sabía que había nacido en Telde, ciudad de Gran Canaria. De su obra, de su poesía, yo entono el mea culpa y me meto en el saco de la mayoría desconocedora.



Leo las poesías de la primera a la última y llego a una conclusión clara: este libro no es para tenerlo en prestado sólo quince días. Merece los honores de tenerlo en casa, en un huequecito, a mano para tomarlo con mucha frecuencia. Cuando se tenga sosiego o cuando se busque porque falta. Porque como se dice en el prólogo y citando un artículo de 1920 Saulo Torón es poeta "de los versos humildes". Vivió toda su vida en la isla y en su obra, el mar, junto al que vivió, es cantado en multitud de versos.



"El mar es a mi vida
lo que al hambriento el pan;
para saciar mi espíritu
tengo que ver el mar".
.......................................
"Yo he visto al mar alzarse
soberbio de altivez;
y luego, humildemente,
tenderse ante mis pies".


Pero no sólo canta al mar. En Poemas del Barrio son cantados la tienda de la esquina, el faro de la Isleta, los bancos del paseo, la barca pescadora, el borracho...


"Rodeado de un enjambre
de chicuelos traviesos,
el borracho del barrio -el más borracho-
porfiado avanza con andar grotesco".
..........................................
"¡Pobre borracho loco,
despojo absurdo, trágico y grotesco,
que tu vida malgastas
para que en mofas te lo pague el pueblo!
Borracho empedernido,
casi estoy por llamarte compañero.
Tú te embriagas de vino,
yo me embriago de ensueño..."


El libro no tiene desperdicio. En su dilatada vida de casi noventa años (1885-1974) pudo Saulo Torón dedicar tiempo y meditación a escribir junto a sus amigos los poetas Tomás Morales, Alonso Quesada y el pintor Néstor. No faltan versos a la familia, otros íntimos, de melancolías y recuerdos, y a la vieja ciudad:


"Rincones queridos
de la ciudad vieja,
refugio del alma
que en vosotros sueña".
.................................
"¡Quién pudiera al tiempo
parar en la senda,
para arrebatarle
lo que se nos lleva:
la paz, la alegría,
la infantil esencia!...
¡Todo lo que el ánima
ahora recuerda
en estos rincones
de la ciudad vieja!...


Y en versos cortos agrupados bajo los títulos de Los Últimos Acordes y Frente al Muro nos deja Saulo parte de su sabiduría:



"Marinero,
pon la esperanza en tu barca;
la voluntad en sus remos".
...
"Burrito de carga,
hermanito mío,
qué vida tan larga!"

Te deseo un buen día.

1 comentario:

Unknown dijo...

joooooooderrrrrr me la pone durísima ohhhhhhh siiiiiii diooooos